En 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH) para identificar derechos y libertades comunes a todas las personas en todas las naciones. Una exprimera dama estadounidense, Eleanor Roosevelt, presidió la Comisión de Derechos Humanos de la ONU que redactó este documento paradigmático. Como presidenta de la comisión, Eleanor Roosevelt no tuvo más que inspirarse en nuestras arraigadas tradiciones estadounidenses para consagrar estos derechos individuales inalienables. La Declaración de Independencia, la Constitución de los Estados Unidos y la Carta de Derechos han guiado a nuestra nación por más de 200 años en la promoción de derechos y libertades.
Gracias a la presidenta de la comisión, Eleanor Roosevelt, y a la DUDH, más personas en todo el mundo gozan de estos derechos y libertades que antes de que se adoptara la Declaración. De hecho, hay un amplio reconocimiento de que la autoridad moral de un gobierno deriva, en gran parte, de su predisposición a proteger los derechos y libertades que se enumeran en la DUDH. Lamentablemente, no todas las naciones han demostrado esta predisposición. El gobierno chino sigue reprimiendo a miembros de minorías religiosas y étnicas en Sinkiang, Tíbet, y en otros sitios, además de socavar las libertades garantizadas a los residentes de Hong Kong en la Declaración Conjunta Sino-Británica y en la Ley Básica. Los regímenes de Irán, Siria y Venezuela cometen cada día gravísimas violaciones de derechos humanos que causan profunda consternación. Para que países como China, Irán, Siria y Venezuela recobren autoridad moral ante las naciones que veneran la paz, deben volver a abocarse a proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Hoy celebramos los derechos universales consagrados en la DUDH y reafirmamos el compromiso de proteger y promover estas libertades fundamentales, universales y esenciales. Estados Unidos seguirá dando siempre su firme apoyo a quienes luchen por sus derechos inalienables y dignidad humana.